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jueves, 9 de abril de 2015

Monumentos de Sevilla: Real Casa de la Moneda

 

 
REAL CASA DE LA MONEDA:

Se construyó en las huertas de las Atarazanas, próxima al río y a pocos pasos de donde llegaban las flotas con los metales. Era el centro neurálgico donde se fundía el oro y la plata de la época que después era convertido en marcos y doblones para posterior sostenimiento de la economía europea en pleno siglo XVI, época de conquistadores del Nuevo Mundo.

La nueva fábrica quedaba a menos de 200 metros de donde estaba la vieja, y así a medio camino entre los muelles y la Casa de la Contratación.

Durante el reinado de Felipe II, la Casa de Sevilla labró el 72% de toda la plata, y el 87% de todo el oro acuñado en la Península, dejando las otras fábricas casi sin trabajo. Se acuña abundante moneda de cobre, vellón, plata y oro, así como los resellos de 1636-1659. Se instalan molinos para acuñar vellón en 1661 pero son abandonados después de 1664. A partir de 1699 se acuña a volante, reconstruyendo los molinos para el previo laminado del metal.

La Ordenanza de 1730 para la centralización de las cecas elimina todas excepto las de Madrid y Sevilla, que acuñaría sólo plata y oro, y Segovia, que se dedicaría a labrar moneda de cobre. En 1855 se proyecta una nueva y gran casa de moneda en Madrid, y el cierre de las demás. En 1861 se inaugura la nueva fabrica madrileña y en 1869 se cierran las casas de Sevilla, Segovia y Jubia, vendiendo todas en pública subasta. La Casa de Sevilla fue dividida en tres partes y vendida en 1870: un total de más de diez mil metros cuadrados por cerca de 244 mil escudos.

El conjunto actual corresponde a las reformas realizadas por Sebastian Van der Borcht, ya que en el siglo XVIII los edificios se encontraban en una situación deplorable. Con una serie de reformas, se pretendía dotar de mayor funcionalidad al edificio. El elemento mas destacable de esta época es la portada principal de acceso, presenta un gran arco central muy rebajado, flanqueado por pilastras jónicas y orejetas almohadilladas. Las pilastras dan paso, en la planta superior, a un frontón partido y escalonado, que albergababa el escudo real y que seria sustituido en el siglo XIX por el balcón que vemos actualmente. Este escudo estaba flanqueado por los dos jarrones que persisten actualmente.

Desde su restauración ha recuperado vida albergando, entre otras cosas, el Teatro La Fundición, que se aloja en la antigua fundición de los metales preciosos que se convertían en monedas. Además, recientemente, se rodaron en sus calles secuencias de la película El Capitán Alatriste, protagonizada por Viggo Mortensen.
 
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